viernes, 6 de mayo de 2011

Básico 6. La centralización borbónica y los decretos de Nueva Planta


El básico 6 nos sitúa en los inicios del siglo XVIII, tras la muerte de Carlos II, el final de la dinastía Habsburgo y la llegada de una nueva dinastía, la borbónica que iniciaría el tránsito hacia una nueva forma de estado. Como criterio general debes, en esta preguntas, explicar tres cuestiones

1. Explica el motivo de la guerra de sucesión, sus contendientes y la llegada de los borbones al poder
2. Explica el contenido de los decretos de Nueva Planta
3. Explica las medidas centralizadoras de Felipe V

Como siempre esta es una propuesta de redacción. Lo que cuenta es lo que tu redactes, a partir de lo explicado en clase y los otros materiales disponibles.



El siglo XVII en España había estado marcado por una profunda crisis, en una época donde reinaban los Austrias menores (los últimos reyes de la dinastía Habsburgo). Las sucesivas guerras (especialmente la de los 30 años), la ruina económica y la corrupción de los validos (nobles que tomaban decisiones en nombre del rey) habían traído la decadencia al reino de España.

A la muerte del último de estos reyes (Carlos II, el Hechizado), en el año 1700, se originó un problema sucesorio. Carlos II había muerto sin descendencia, pero había dejado en su testamento a Felipe de Anjou como su legítimo heredero, el cual era nieto del rey Luís XIV de Francia, quien trató de favorecer por todos los medios la sucesión para aumentar el poder de la Corona Francesa.

Sin embargo, las potencias europeas (principalmente Inglaterra, Holanda y Suecia) no estaban dispuestas a tolerar una unión franco-española que las dejara aisladas y decidieron apoyar la candidatura al trono español del Archiduque Carlos de Habsburgo.

En el ámbito interior, el Reino de Castilla apoyaba a Felipe, ya que él pretendía acabar con todos los privilegios de Aragón y establecer una verdadera unificación y modernización en la Península. Sin embargo, la Corona de Aragón apoyaba a Carlos, quien había prometido preservar sus fueros y privilegios.

De esta forma estalló la Guerrade Sucesión Española, que terminaría en el año 1714 con la firma del Tratado de Utrecht.

Por este tratado, las potencias europeas aceptan a Felipe como Rey de España (reinará como Felipe V e introducirá la dinastía de Borbón, que ha permanecido en España hasta la actualidad). A cambio, España cede todas sus posesiones territoriales en Europa y parte de sus colonias americanas. Destacará la pérdida de Gibraltar y Menorca, que pasan a dominio inglés, aunque Menorca será posteriormente recuperada. De igual forma, España permite que sus colonias mantengan un libre comercio con las potencias europeas.

Felipe V, a su llegada al poder, introducirá en España una serie de reformas:

Los Decretos de Nueva Planta son un conjunto de normas por las cuales se elimina todo el ordenamiento jurídico e institucional foral, así como los privilegios, de la Coronade Aragón. Además, suponen el final de la unión dinástica establecida en tiempos de los Reyes Católicos.
Por estos decretos se suprimirán las Cortes de Aragón, se eliminarán sus leyes y se prohibirá la lengua catalana, sus aduanas y derecho mercantil. Las instituciones y el sistema legal de Castilla serán los que dominen en todo el territorio. Son medidas que hay que entender, de un lado, como la aplicación de un nuevo concepto de política donde el poder absoluto del rey se entiende como un elemento de modernización y eficacia, y, de otra, un duro castigo a la Corona de Aragón, alineada en la Guerrade Sucesión, con el bando contrario a Felipe. La única excepción a estas supresiones será el mantenimiento del derecho civil y la supresión de las levas o reclutamientos.

En 1707 fueron suprimidos los fueros de Aragón y Valencia, en 1715 los del Reino de Mallorca y en 1716 se abolieron los fueros de Cataluña. De esta forma salvo el País Vasco y Navarra, todo el territorio nacional quedaba unificado política y administrativamente.

Con la centralización Felipe V instaura un gobierno mucho más eficiente y moderno. Para ello, elimina antiguas instituciones como el polisinodio (solo se mantienen los consejos de Estado y Castilla) y se crea la figura del intendente (un gobernador representante del rey en cada provincia). Además, los virreinatos son sustituidos por provincias, los municipios pierden parte de su autonomía (ya que pasan a ser gobernados por un corregidor nombrado por el rey) y se crea un ejército nacional. Igualmente, se aplica una política regalista, mercantilista y absolutista.
El cambio más importante es la creación de los secretarios de despacho (personas de la máxima confianza del rey, que serán los precursores de los ministros actuales).

La reforma política y administrativa de Felipe V fue la más importante desde la etapa de los Reyes Católicos.


Foto losejercitosdelrey.es

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