Tras estudiar el origen de
Para comenzar vamos a repasar como fue el final del reino visigodo y el origen de la España musulmana, contra la que combatirán los reinos que vamos a tratar en este tema. Mira este vídeo
I.
CONDICIONANTES DEL ORIGEN Y DESARROLLO DE LOS REINOS CRISTIANOS
Esta parte
de nuestra historia se desarrolla en la primera fase de la edad Media, o Alta
Edad Media. Es un periodo caracterizado por la aparición del feudalismo, la
división europea tras la unidad que había significado el mundo romano, la
degradación de la vida política, social y económica, lo que supone un paso
atrás en la historia, y el comienzo del enfrentamiento entre los mundos
occidental y cristiano y oriental e islámico.
En ese
marco de circunstancias nacen los estados cristianos españoles, amparados en:
a- El
abandono de la zona norte por parte de los árabes, ante su escaso interés
económico y geografía inhóspita.
b- No
existió un estado de guerra permanente estos siglos, sino que a los periodos
militares les sucedieron otros de colaboración.
c- Los
cristianos dependieron mucho de la fortaleza o debilidad interna de los reinos
musulmanes
d- Su
historia es la de la consolidación del feudalismo en la Península Ibérica ,
aunque en estado menos puro a medida que avanzamos hacia el oeste.
e- Todos
surgieron de una fusión entre las comunidades previas que existían en las
montañas septentrionales y los refugiados visigodos
f- Todos
avanzaron y sobrevivieron amparados en su identidad de comunidades cristianas,
y bajo la influencia mayor o menor de Europa (Francia y Camino de Santiago).
Antes de conocer como fue el desarrollo de cada reino, este vídeo de artehistoria nos va a permitir tener una idea global del proceso. Empezamos
Antes de conocer como fue el desarrollo de cada reino, este vídeo de artehistoria nos va a permitir tener una idea global del proceso. Empezamos
II. ORIGEN
DE LOS REINOS CRISTIANOS
2.1. ORIGEN
DE LOS NUCLEOS CRISTIANOS. EL FINAL DEL REINO VISGODO.
Tras la
derrota rodriguista en Guadalete, el gobierno visigodo se derrumbó de una forma
muy rápida. Muerto el rey y eliminada la oposición por los musulmanes, la
capacidad de reacción de la sociedad española ante el invasor fue prácticamente
nula. Aquí es preciso tener en cuenta varios factores explicativos:
· - de un
lado la ausencia de poder capaz de organizar la defensa;
· - de otro
el cansancio de la población ante tantas luchas y conflictos que presentaba a
los invasores como pacificadores;
· - el carácter
modernizador y tolerante de los invasores;
· - la
colaboración de la nobleza superviviente, que arrastraba a sus siervos y
vasallos, ávida de mantener sus privilegios y tierras;
· - el
carácter nacional del gobierno musulmán, muy pronto desligado e independiente
del resto del Islam;
· - la
modificación de las formas de vida en amplias zonas de la Península , que entregaba
tierras y libertades a masas campesinas y urbanas;
· - y,
finalmente, la facilidad de conversión a la nueva religión de la población del
común, poco y mal evangelizada, que aceptaría con facilidad una religión
sencilla, directa, no tocada por la corrupción y muy similar en algunos
aspectos a la arriana.
En torno a la Cordillera Pirenaica ,
surgieron también en los primeros momentos de la ocupación un conjunto de focos
de resistencia, copartícipes de ciertas características.
Todos ellos
mantuvieron durante los primeros siglos de su existencia una mayor dependencia
de factores externos (influencia franca, musulmana o astur),que de factores
internos evolutivos, todos se asentaron sobre áreas que habían sido escasamente
romanizadas, y todos tendrían un desarrollo inicial lento y titubeante, en
parte basado en las difíciles condiciones geográficas de sus territorios.
2.2.
RESUMEN GENERAL DE LA
FORMACION DE LOS REINOS CRISTIANOS.
A-
Asturias. Se inicia por el aun vigente espíritu independiente de las tribus
septentrionales, con el apoyo de los rodriguistas. Se basa en un fuerte apoyo
externo, por parte de los cristianos europeos y la iglesia. Su líder más
importante es Alfonso III.
B- León. Es
el nombre de Asturias tras su primera expansión.
C-Castilla.
Nace a partir de las marcas de la
Rioja. Los campesinos que las habitan poseen la behetria, y
sus condes grandes poderes en compensación por defender la frontera. Acabará
incorporando a Asturias.
D-Aragón
Crece en torno a los grupos de resistentes visigodos de los valles pirenaicos.
Su fuerza se basará en la unificación de estos núcleos y el apoyo catalán.
E-Navarra
Se origina en el deseo de independencia de las tribus vasconas
F-Cataluña
Es una agregación de condados, surgidos por la marca creada por los francos en
Gerona y Lérida, como zona de defensa contra el avance musulmán. Su
independencia de los franceses le introduce en la historia española.
2.3. EL
REINO DE ASTURIAS
Con todo,
algunos seguidores de Rodrigo ofrecerían aislada resistencia en los primeros
años de ocupación. Tras hacerse fuertes en algunas ciudades, los restos de la
monarquía visigoda buscaron refugio en el norte, en las tierras húmedas y
montañosas del Cantábrico y el Pirineo, tierras en las que contaban con
partidarios, propiedades, o que eran conocidas por haber desempeñado cargos en
tiempos anteriores.
Durante la
primera mitad del siglo VIII la actuación de estos grupos rebeldes a los
invasores fueron muy limitados. La mayoría de la población no les prestaba
apoyo, por las razones señaladas, y los reinos cristianos europeos tampoco,
demasiado preocupados por sus problemas internos (el intento musulmán de avance
hacia Europa, solo frenado por Carlomagno en Poitiers),y ante el hecho cierto
de que en la España
musulmana la mayoría de la población era y practicaba libremente la religión
católica (los llamados mozárabes), parte de la administración continuaba en
manos de visigodos, las propiedades de los españoles habían sido respetadas, e
incluso, los árabes habían colocado en el trono a un rey visigodo (una
marioneta a su servicio), el obispo católico Oppas. En estas circunstancias la
mayoría de los núcleos de resistencia no pasaron del grado de refugios de
bandoleros.
Pero en la Cordillera Cantábrica
la situación era distinta. Allí, el número de rebeldes era muy numeroso,
existía una cierta organización política y económica previa, el ducado visigodo
autónomo de Cantabria, al mando del leal rodriguista duque Pedro, y al mando de
los rebeldes se encontraba un miembro de la familia real visigoda: Pelayo. La
acertada unión de las comunidades cántabras y visigodas, la simbólica victoria
de los rebeldes sobre una pequeña retaguardia árabe en Covadonga (722) y la
ejecución de Oppas convertirían a este núcleo en un centro mítico de
resistencia que atraería a otros rebeldes y haría tomar a los musulmanes una
actitud más decidida ante los mozárabes (iniciando el lento descontento de la
población española) y defensiva ante los rebeldes (fortificación de la línea
del Duero y creación de una tierra de nadie a modo de contención). El casamiento de Ermesinda, hija de Pelayo y Alfonso, hijo de Pedro Duque de Cantabria, refrendaría esta unión.
El siglo
VIII quedó marcado en el pequeño reino septentrional por la supervivencia. Los
primeros grandes reyes asturianos (Pelayo, Favila y Alfonso I) lucharon por el
reconocimiento de la nueva entidad política, iniciaron la fortificación del
reino, la extensión hacia el este y el oeste, la lucha guerrillera contra el
invasor y la configuración de las primeras instituciones de gobierno. Sin embargo,
la necesidad de organización y aprovechamiento máximo de los recursos sociales
llevaría muy pronto a la eliminación de la sociedad igualitaria cántabra y a la
feudalización del territorio. Los monarcas astures tendieron a entregar a sus
gobernadores (nobles) amplios derechos de gobierno y explotación de sus
provincias, ante la imposibilidad de pagarlos o contar con medios para un
control directo. Así, los visigodos reprodujeron muy pronto en Cantabria sus
formas de vida tardías. Asturias quedo con vertida en una multiplicación de
células aisladas, de carácter rural y agrícolamente autosuficiente, con fuerte
especialización social (campesinos y guerreros),alta jerarquía social
(servilización) y dispersión del poder (solo coordinado por el rey en casos de
excepción).
Cuajado el
modelo civilizador, los reyes del siglo IX (Alfonso II, Ramiro I y Ordoño I)
iniciaron un lento despegue ayudado por el inicio de la ruta europea de
peregrinación hacia Santiago de Compostela, que ponía en contacto Asturias con
Europa. El desarrollo artístico (arte asturiano),la creación de las primeras
instituciones de gobierno real (el consejo real y la cancillería) y la
expansión son prueba de ello. Los asturianos comenzaron una lenta ocupación de
las tierras abandonadas por los musulmanes entre la Cordillera y el Duero
(presura),asentando en ellas a comunidades campesinas, dotadas de ciertos
privilegios que compensaban los peligros de su nueva vida (las behetrias).
Fruto de
esta expansión, la capital se trasladaría hacia León, con lo que el reino
tomaría el nombre de esta ciudad.
Sin
embargo, el siglo X traería una profunda crisis al joven reino, ya reconocido a
nivel internacional. La subida al trono de poderosos califas como Abd ar-Rahman
III y efectivos generales como Almanzor llevó a Asturias al colapso, ante los
devastadores ataques musulmanes (razzias). Las luchas internas entre la nobleza
astur (caso de la guerra civil entre Ramiro III y Vermudo II) sumieron al reino
en el caos. Con todo el hecho de mas gravedad se encontraría en la
fragmentación del propio territorio. Desde un siglo antes, los flancos del
reino habían sido entregados a gobernadores especiales (marqueses) al mando de
provincias militarizadas (marcas) con gran nivel de autonomía para hacer frente
a los musulmanes en las zonas mas vulnerables de la frontera (el valle alto del
Ebro o Rioja, y las tierras bajas de Galicia).
A fin de
atraer a la mayor cantidad posible de campesinos a estas tierras y así
facilitar la defensa, los marqueses habían obtenido el permiso de los reyes
astures de conceder a los colonos que se asentasen en estas tierras de frontera
los privilegios de behetria (libertad para escoger a su señor, lo que suavizaba
las condiciones de servidumbre), de jueces (derecho a formar asambleas de
hombres libres en las aldeas para el gobierno de las pequeñas comunidades
campesinas) y de alodio (asentamiento de campesinos libres en pequeñas villas).
El despegue económico que estas medidas propició en las tierras del Ebro, llevó
a que esta marca adquiriera una mayor fortaleza que el débil reino astur,
sumido en guerras civiles. Los condes (jefes militares al servicio del marques)
de la Rioja
(conocida como Castilla por la abundancia de estos) decidieron la independencia
del territorio a mediados del siglo X, aprovechando las guerras civiles astures
y nombraron primer conde independiente a Fernan González. El nuevo estado, con
capital en Najera, muy pronto se consolidaría como estado independiente (al
contrario que Galicia, pronto recuperada), se extendería territorialmente hasta
el punto de arrinconar al reino de León, crecería económicamente y adquiriría
el rango de reino. Hay que tener en cuenta que además de la vitalidad que
proporcionaba la existencia de amplias capas de campesinos libres o semi
libres, Castilla contaba con un poder político mas fuerte, dentro de los
limites de la época, pues el poder y la autoridad de los gobernantes solo era
visible en tiempos de guerra, manteniéndose la autonomía de los nobles en las
demás circunstancias. Como Castilla se encontraba en conflicto permanente con
los árabes, esta situación acrecentó el poder y la coordinación de los reyes
castellanos sobre sus nobles y súbditos en aras de satisfacer sus necesidades
de supervivencia. Como ves es otro modelo de organización frente a la
feudalización astur.
2.4. EL
REINO DE NAVARRA
En un
primer momento, el núcleo navarro surgió del deseo de las tribus vasconas de
crear una organización política que les diese la independencia buscada en
siglos de lucha contra romanos y visigodos. El primer intento organizativo
provendría del clan de los Ariste, poderoso grupo militar, que uniría a los
clanes navarros ante la falta de un estado central que pudiera someter el
levantamiento. Apenas dos décadas después de producirse la invasión musulmana,
la familia muladíe de los Banu-Qasi, antigua familia noble visigoda, declaró su
independencia de Córdoba, aprovechando la derrota de los emires en Poitiers y
un levantamiento berebere. Ambos grupos, Ariste y Banu-Qasi, establecerían un
pacto que perduraría durante todo el siglo VIII, y que facilitaría la
supervivencia de estos dos núcleos rebeldes. Ya en el siglo IX, y tras el
reconocimiento de la iglesia de Navarra por el papado, en la figura del abate
de Leyre, la nobleza del norte y el oeste, en contacto con astures y francos,y
apoyada por los deseos de afianzamiento del clero, comenzó a hostigar a la
corona en petición de Inmunidades o privilegios de autogobierno. El deseo de
los Ariste en no ceder en sus prerrogativas, determinaría la intervención
militar astur en ayuda de la nobleza feudalizante. La intervención se saldaría
con la destitución de los Ariste y la llegada al trono de la familia Garcia
Jiménez, con la que se iniciaría un proceso de feudalizacion y destrucción de
la propiedad comunal similar al ocurrido en Asturias.
2.5. EL
REINO DE ARAGON
Al
contrario que en los casos anteriores, en Aragón no existió un componente
nacionalista. En principio, la población inicial de este núcleo se formó por
rebeldes visigodos que se refugiaron en las montañas pirenaicas tras la derrota
de Rodrigo, pero que, salvo excepciones, no encontraron grupos tribales en sus
refugios. Durante todo el siglo VIII, estos refugiados se agruparon en débiles
comunidades separadas entre si (valles del Aragón, Ribagorza, Sobrarbe o
Pallars). Ya en el siglo IX, estos frágiles reinos vieron la necesidad de
alcanzar una organización mas efectiva y sólida, que les permitiese sobrevivir,
frente a la presión ejercida por los habitantes del llano, muladíes o visigodos
capitulados. Esta necesidad, la influencia del feudalismo franco y el
reconocimiento papal a través de los monasterios de Siresa y San Juan de la Peña , provocaría la
unificación de los distintos núcleos bajo la égida del mas fuerte, Aragón, y el
inicio de un fuerte proceso feudalizador basado en la necesidad de compensar a
las noblezas de los valles por la unificación, a través de concesiones
políticas, y en la necesidad de proveerse de un eficaz sistema defensivo.
2.6. LOS
CONDADOS CATALANES
Las
actuales provincias de Barcelona, Gerona, Lerida y Huesca, fueron ocupadas por
los musulmanes durante los primeros años de la conquista, siendo a partir de
entonces utilizadas como base logística para continuos ataques al reino franco.
Aunque una gran parte de la población visigoda permaneció en el territorio bajo
el sistema de capitulación, un gran número de visigodos huyó a territorio
franco buscando la protección del Reino Franco. Estos fugitivos o
"hispanii",conseguirían, con ayuda franca, recuperar las áreas
septentrionales de Cataluña, la llamada "Cataluña Vieja",en los
primeros años del siglo IX. Desde ese momento, y como pago de su ayuda Cataluña
quedaría convertida en una marca del Reino Franco, gobernada por funcionarios
enviados por Carlomagno.
Las
revueltas nobiliarias del Reino Franco, mediado el siglo IX, provocaron el
hecho de que Cataluña pasara a depender directamente de los condes de Tolosa,
en calidad de feudo. La perdida de la protección real y los deseos de
rentabilizar el territorio, por parte de los de la casa de Tolosa, propiciaron
una ‚poca de abusos por parte de los gobernantes, perdida de tierras por los
campesinos y servilizaciones masivas que crearon un gran descontento en la
población.
A la muerte
de Carlomagno, se desata en Francia una violenta lucha por el poder en la que
los condes de Tolosa se colocaron del bando perdedor. Por el Tratado de Verdún,
que ratificaba los derechos al trono de Carlos el Calvo, Cataluña pasaría a
depender de los condes de Carcasona. En aquel momento, Cataluña se había
convertido ya en un territorio muy extenso, que junto a las áreas antes
nombradas se extendía por el Rosellón, Cerdaña y el Sur de Barcelona, su
nobleza, adiestrada en las guerras civiles francas poseía una gran pericia
militar, sus campos eran muy productivos en virtud de la férrea organización
agrícola que imponían los señoríos jurisdiccionales, y su organización política
había cristalizado en torno a una división en distritos militares llamados
condados, que englobaban varios señoríos y que operaban ya con plena autonomía
y no como representantes de reyes o condes franceses.
A fines de
siglo X, aprovechando un nuevo momento de debilidad franca, los condes de
Barcelona, la familia Borrell, conseguirían la plena independencia catalana.
Desde ese momento surgiría en el Este de la Península uno de los
estados mas peculiares de nuestra historia, basado en
-Nunca fue
un reino, sino una federación de condados bajo el liderazgo de la rica ciudad
de Barcelona.
-La iglesia
catalana se mantendría siempre supeditada al poder político.
-Sus
estructuras feudales serian muy tempranas.
-Su fuerza
se basaría en su riqueza, no en su poder militar.
-Su
expansión se realizaría hacia el Norte o hacia el mar buscando mas la riqueza
comercial que la apropiación de tierras.
-Junto a su
feudalismo duro y radical, coexistirían, desde el inicio, enclaves burgueses
libres.
-Su avance
hacia el sur se realizaría mediante un tipo de presura colectiva denominada
"Alou".
Imagen de portada actuall, mapas Edelvives
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