En realidad cualquier disculpa es buena para crear una escuela diferente, pero la navidad parece que predispone a la aventura, y a que esta sea compartida. Este año los diez últimos días antes de vacaciones han sido diseñados por los alumnos de segundo ciclo de secundaria y de bachillerato integrantes del proyecto educativo eolapaz. Diez días donde la actividad del aula ha quedado en segundo plano por un calendario de actividades con el objetivo de conocer el entorno y sus raíces culturales a partir de los contenidos curriculares de cada etapa, trabajar en la elaboración de proyectos, potenciando actitudes de emprendimiento y llevar a cabo acciones de compromiso social.
El eje de la campaña ha sido la recogida de alimentos, en colaboración con el banco de alimentos de Cantabria, superándose en un 20% lo obtenido el año pasado, bien mediante la entrega directa por parte de los alumnos o mediante actividades que solicitaban la inscripción mediante la entrega de productos envasados. Así se ha realizado un concursos de villancicos, que ha animado los recreos entre el 10 y el 20 de diciembre, y que ha contado con la participación de quince coros y solistas de primaria, secundaria e incluso del profesorado, un concurso de adornos navideños que han decorado un gran árbol de navidad colocado en la zona de acceso a bachillerato, torneos deportivos con equipos de diferentes edades, una exposición del agrupo de acción junior de Amnistía Internacional, sobre la situación de los derechos humanos en el mundo, “Noche Buena en
Una de las actividades que han resultado más gratificantes ha sido la organización de un ciclo de microteatro en inglés. Entre el 10 y el 20 de diciembre, cuarenta alumnos de 3º y 4º de secundaria y de 1º de bachillerato han representado cada tarde un cuento de navidad para los alumnos de infantil y primer ciclo de primaria, en inglés. Para ello han trabajado la expresión corporal y la expresión oral en inglés, han creado narraciones sobre los elementos culturales de este periodo del año y han elaborado fichas sobre sus narraciones para que los profesores de esos ciclos trabajaran previamente los temas y el vocabulario tratado. Tras cada sesión, llevada a cabo en sus tardes libres, los alumnos organizaban una merienda navideña y juegos con los niños. Una actividad que ha sido la más valorada por el alumnado, por su significado como ejemplo de aprendizaje colaborativo y actitud de compartir. En todo este tiempo las redes sociales han sido el vehiculo idóneo para mantener informada y comprometida a toda la comunidad escolar, que junto al día a día en el blog de los alumnos podrá conocer lo aprendido y trabajado en un cortometraje rodado en estos días por los alumnos y que se editará a la vuelta de vacaciones en un taller de cine puesto en marcha por los alumnos de diversificación curricular, como proyecto de cultura emprendedora
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