Victoria Piñeiro es una joven gallega, aunque reside en Cantabria, que es desde hace algún tiempo timonel de Astillero. Con su equipo de ocho con timonel, Victoria ha participado este invierno en importantes competiciones internacionales, ganado incluso regatas como la de Burdeos (Francia) o el Open de las Naciones de Castrelo de Miño (Orense).
Se ve que visto el rendimiento de la moza, y viendo cerca el campeonato nacional, Astillero había planteado a la Federación Española de Remo un cambio de reglamentos que permitiera a Victoria participar en los próximos campeonatos, cosa que con el reglamento actual no es posible. Pues la federación que dirige el ex regatista olímpico Fernando Climent ha desestimado tal solicitud, así que, o se hace transexual o no podrá embarcar como timonel en ningún bote masculino.
Como suele ocurrir, y tal como suele contar mi profesor de filosofía, la vida es un poliedro de muchas aristas. Y este las tiene todas.
Como es lógico, los políticos, que se apuntan a un bombardeo, han tomado el tema por la sisa y han sacado, o pretenden sacar, petróleo. Lo curioso es que esta situación se veía venir desde hace años, y ninguno de ellos había siquiera pensado en afrontarla. Yo se poco del tema, lo reconozco, pero por lo poco que he leído y me han contado mis amigos, desde hace casi treinta años, esta práctica de timoneles mujeres en barcos de tíos, es habitual en medio mundo en pruebas no oficiales y torneos, e incluso en competiciones oficiales en países nada tercer mundistas como Francia, Bélgica, el Reino Unido, Alemania, Australia y Nueva Zelanda, e incluso en pruebas de alto nivel como el desafío universitario anual entre Oxford y Cambridge.
Claro, en cuanto el tema salio a la luz (debe ser que estaba en un sótano), y se atisbo el choque con la federación nacional de remo, todo chichi se colocó la medalla de la igualdad y defendió a Victoria. Los Gobiernos de Cantabria y Galicia, los partidos regionales, el parlamento autónomo y las ministras de Educación e Igualdad, Mercedes Cabrera y Bibiana Aido. La Federación, al principio, dudo y hasta casi cedió. Pero viendo que su autoridad quedaría maltrecha ante tanta presión, y quien sabe porque contrapresión de que equipos y que federaciones y sponsors, ha dicho que no. ¿El motivo?, obvio, el reglamento, que todo el mundo conoce hace tiempo, y nadie se ha molestado en quemar con gasolina, y que dice muy claramente que las normas de la FISA (la internacional) son para cumplirlas, y solo se pueden mover en los años postolímpicos.Fijaros si soy mala, que me da que aquí Astillero se ha movido solo por el interés, no en las mujeres, sino en Victoria, justo en un año en que está en juego el titulo nacional, hasta hoy en manos de los de la bahía, y que alguno, listo a arrebatárselo, habrá querido quitárselo, dejando fuera a su valiosa timonel. Y este, el enemigo deportivo de Astillero, se ve que tiene más mano en la federación.
La postura de ofendido y mancillado en su honor de Francisco Garate, presidente de Astillero, solo es comprensible desde el punto de vista de que Astillero necesita a Victoria en este momento por las especiales circunstancias del remo, pero poco le importa si esta es mujer o un trozo de tocino. Los equipos han evolucionado mucho en material y preparación, la igualdad es máxima, y las competiciones se ventilan en milésimas. Uno de los pocos campos en los que se puede limar tiempo (como en la F1), es en peso y aerodinámica. No puedes poner a régimen a los remeros, por cuestiones evidentes. Pero el timonel no tiene por que ser corpulento, solo hábil y listo. Como la competición establece un límite inferior de peso de 55 kilos, las mujeres son ahora necesarias en este sistema de estrategias. Vaya razón de mierda para defender la causa de la igualdad. Pesamos poco. Pero, eso si, como hay que disimular la cosa, se dicen frases tan bonitas como esa de que las instituciones "velarán siempre por el establecimiento de la igualdad y la justicia, así como por la supresión de todo tipo de discriminación que pudiera darse por sexo o raza". Joder, la palabra manipulación se esta quedando escuálida, hay que buscar un eufemismo plus. Que duda cabe que sus compañeros de equipo, los que la conocen y comparten ilusiones con ella la defienden con nobleza. ¿Pero el resto?.
Y aquí esta otro lado del poliedro. ¿Quiénes son el resto?. Porque, y aquí si que hablo con conocimiento de causa, todo ese ejercito de chupones y fantasmas que medran en el deporte, yo no se que pintan aquí. No es el caso de Climent, que fue remero, aunque para el caso, pero en la mayoría del resto, el deporte, todo él, especialmente el base, esta en manos de gente que no tiene ni idea. Directivos y jefecillos que les gusta mandar, en esto o en crianza de nabos, da igual. Aprendices de políticos, que nos tratan a las que nos jugamos las piernas como si fuéramos analfabetas, cuando comen, medran y sienten el regustillo del poder gracias a los tontos que pagamos cuotas, ganamos para que ellos reciban trofeos y se hagan fotos y existimos para que ellos tengan cargo y mando. ¿Quién es esa gente ajena al deporte, que ni lo practica, ni lo quiere, ni lo cuida, para tomar decisiones a capricho que afectan a las ilusiones y el placer de jugar, remar o volar de gente normal como yo, como Victoria o como Nadal, que hasta ese esta hasta los huevos de estos come pesebres con voz y voto, cosa que yo no tengo, por ejemplo. Y luego dice el presidente de Astillero, que no entiende por qué los reglamentos deportivos "no se adaptan a los tiempos". Ahora, porque a ti te interesa. Porque bien de clubes que usan a remeros juveniles, dejando de lado a las chicas. Porque los juveniles pesan poco.
Puede pareceros un tema banal este. Pero no lo es. Si no conseguimos la igualdad, la justicia y el sentido común en cuestiones sencillas como esta, un juego, la igualdad real no llegará nunca, y seguirá avanzando, solo en tanto en cuanto a algún hombre le interesa.
Se ve que visto el rendimiento de la moza, y viendo cerca el campeonato nacional, Astillero había planteado a la Federación Española de Remo un cambio de reglamentos que permitiera a Victoria participar en los próximos campeonatos, cosa que con el reglamento actual no es posible. Pues la federación que dirige el ex regatista olímpico Fernando Climent ha desestimado tal solicitud, así que, o se hace transexual o no podrá embarcar como timonel en ningún bote masculino.
Como suele ocurrir, y tal como suele contar mi profesor de filosofía, la vida es un poliedro de muchas aristas. Y este las tiene todas.
Como es lógico, los políticos, que se apuntan a un bombardeo, han tomado el tema por la sisa y han sacado, o pretenden sacar, petróleo. Lo curioso es que esta situación se veía venir desde hace años, y ninguno de ellos había siquiera pensado en afrontarla. Yo se poco del tema, lo reconozco, pero por lo poco que he leído y me han contado mis amigos, desde hace casi treinta años, esta práctica de timoneles mujeres en barcos de tíos, es habitual en medio mundo en pruebas no oficiales y torneos, e incluso en competiciones oficiales en países nada tercer mundistas como Francia, Bélgica, el Reino Unido, Alemania, Australia y Nueva Zelanda, e incluso en pruebas de alto nivel como el desafío universitario anual entre Oxford y Cambridge.
Claro, en cuanto el tema salio a la luz (debe ser que estaba en un sótano), y se atisbo el choque con la federación nacional de remo, todo chichi se colocó la medalla de la igualdad y defendió a Victoria. Los Gobiernos de Cantabria y Galicia, los partidos regionales, el parlamento autónomo y las ministras de Educación e Igualdad, Mercedes Cabrera y Bibiana Aido. La Federación, al principio, dudo y hasta casi cedió. Pero viendo que su autoridad quedaría maltrecha ante tanta presión, y quien sabe porque contrapresión de que equipos y que federaciones y sponsors, ha dicho que no. ¿El motivo?, obvio, el reglamento, que todo el mundo conoce hace tiempo, y nadie se ha molestado en quemar con gasolina, y que dice muy claramente que las normas de la FISA (la internacional) son para cumplirlas, y solo se pueden mover en los años postolímpicos.Fijaros si soy mala, que me da que aquí Astillero se ha movido solo por el interés, no en las mujeres, sino en Victoria, justo en un año en que está en juego el titulo nacional, hasta hoy en manos de los de la bahía, y que alguno, listo a arrebatárselo, habrá querido quitárselo, dejando fuera a su valiosa timonel. Y este, el enemigo deportivo de Astillero, se ve que tiene más mano en la federación.
La postura de ofendido y mancillado en su honor de Francisco Garate, presidente de Astillero, solo es comprensible desde el punto de vista de que Astillero necesita a Victoria en este momento por las especiales circunstancias del remo, pero poco le importa si esta es mujer o un trozo de tocino. Los equipos han evolucionado mucho en material y preparación, la igualdad es máxima, y las competiciones se ventilan en milésimas. Uno de los pocos campos en los que se puede limar tiempo (como en la F1), es en peso y aerodinámica. No puedes poner a régimen a los remeros, por cuestiones evidentes. Pero el timonel no tiene por que ser corpulento, solo hábil y listo. Como la competición establece un límite inferior de peso de 55 kilos, las mujeres son ahora necesarias en este sistema de estrategias. Vaya razón de mierda para defender la causa de la igualdad. Pesamos poco. Pero, eso si, como hay que disimular la cosa, se dicen frases tan bonitas como esa de que las instituciones "velarán siempre por el establecimiento de la igualdad y la justicia, así como por la supresión de todo tipo de discriminación que pudiera darse por sexo o raza". Joder, la palabra manipulación se esta quedando escuálida, hay que buscar un eufemismo plus. Que duda cabe que sus compañeros de equipo, los que la conocen y comparten ilusiones con ella la defienden con nobleza. ¿Pero el resto?.
Y aquí esta otro lado del poliedro. ¿Quiénes son el resto?. Porque, y aquí si que hablo con conocimiento de causa, todo ese ejercito de chupones y fantasmas que medran en el deporte, yo no se que pintan aquí. No es el caso de Climent, que fue remero, aunque para el caso, pero en la mayoría del resto, el deporte, todo él, especialmente el base, esta en manos de gente que no tiene ni idea. Directivos y jefecillos que les gusta mandar, en esto o en crianza de nabos, da igual. Aprendices de políticos, que nos tratan a las que nos jugamos las piernas como si fuéramos analfabetas, cuando comen, medran y sienten el regustillo del poder gracias a los tontos que pagamos cuotas, ganamos para que ellos reciban trofeos y se hagan fotos y existimos para que ellos tengan cargo y mando. ¿Quién es esa gente ajena al deporte, que ni lo practica, ni lo quiere, ni lo cuida, para tomar decisiones a capricho que afectan a las ilusiones y el placer de jugar, remar o volar de gente normal como yo, como Victoria o como Nadal, que hasta ese esta hasta los huevos de estos come pesebres con voz y voto, cosa que yo no tengo, por ejemplo. Y luego dice el presidente de Astillero, que no entiende por qué los reglamentos deportivos "no se adaptan a los tiempos". Ahora, porque a ti te interesa. Porque bien de clubes que usan a remeros juveniles, dejando de lado a las chicas. Porque los juveniles pesan poco.
Puede pareceros un tema banal este. Pero no lo es. Si no conseguimos la igualdad, la justicia y el sentido común en cuestiones sencillas como esta, un juego, la igualdad real no llegará nunca, y seguirá avanzando, solo en tanto en cuanto a algún hombre le interesa.
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