Mes de febrero, mes de Manos Unidas, mes (aunque deberían ser todos) adecuado para mirar a nuestro alrededor y darnos cuenta de las necesidades que se abalanzan sobre nosotros.
Ya pasaron los tiempos en que la pobreza parecía afectar a unos pocos habitantes de extremo de la sociedad, hoy es una amenaza a que puede caer sobre cualquiera de nosotros. Lo decía Cáritas hace poco en un informe contundente. “La clase media se había roto”.