miércoles, 7 de julio de 2010

A ti que cada dia nos lees

Llevamos días de autocomplacencia y halagos, y conviene volver a la realidad y no olvidarnos de nuestro verdadero objetivo y de que debemos seguir caminando. Ha sido un gran triunfo, creo que muy merecido. Un triunfo, como lo han sido los anteriores, principalmente de este equipo, muy bueno, es cierto. Pero es también de los anteriores, grandes equipos de El País de los estudiantes que han jalonado estos 9 años de trabajo, cada uno de los cuales ha ido creando una experiencia y un aliento que nos ha llevado ahora al triunfo.
Enredados, la marca de eolapaz para El país, es el símbolo de lo que queremos que sea la Paz, un colegio con muchos defectos pero con una gran virtud, sus alumnos, los que están, y los que estuvisteis. Por vosotros existimos, y sin vosotros no seriamos nada. El premio reconoce la labor, en el país, y en eolapaz cada semana, de 18 jóvenes extraordinarios, de una coordinadora que es antigua alumna, de un jefe de redacción, Pablo, que es antiguo alumno, de ti que nos estimulas, nos lees o colaboras y también eres de los nuestros, y de Ramón, de Erika, de Luis, de Ruth, de Iván, de Aintze, de Javier, de Raquel, de Noelia, de José Luis, de Alex, de Fernando, de Kevin, de Ignacio, de Ángel ... Es también el recordatorio de que juntos podemos hacer grandes cosas, que hemos convertido un juego, un periódico de colegio, desde aquel mítico tu que pías, en un lugar libre, abierto y reconocido, donde la Paz demuestra que no es un centro aldeano reducido a sus matriculados, sino abierto a todos, los que están, los que estuvieron y los que nunca han estado. Es el recordatorio de que debemos mirar atrás y que podemos ayudar a los que nos siguen. Igual que podemos ayudar a los más jóvenes a participar en un concurso, podemos ayudarles a matricularse en una universidad lejana, o asesorarles desde nuestra experiencia en sus estudios o abrirles camino en el mundo del trabajo o echarles una mano en la preparación de un examen de estadística, o colgar materiales que ayuden o preparándoles unos apuntes de historia. Y si mantenemos esa cadena devolveremos parte de lo que recibimos de los demás y podremos seguir siendo grandes. Hay muchas, muchas cosas que cambiar, dentro y fuera de un pequeño colegio de provincias. Y podemos hacerlo, contando el mundo como creemos que es, mostrando en una hoja lo que otros callan, señalando con el dedo y la palabra lo que sobra, batiendo palmas ante lo que son pasos adelante, poniendo voz propia donde otros la ponen por vosotros, o tendiendo una mano a las nuevas generaciones. Podemos hacerlo, eso demuestra este triunfo.


A todos los que nos habéis traído hasta aquí, de todo corazón gracias, muchas gracias. Y a los que queréis caminar junto a nosotros, bienvenidos, por que os necesitan, os necesitamos

2 comentarios:

Papreiro dijo...

Y a ti que nos animas cuando estamos bajos de moral por hacernos ver más allá de nuestras propias narices que existen muchas cosas por descubrir, sitios donde encontrar nuestra razón y nuestra verdad. Por que siempre tienes una palabra que nos hace sonreir y por algo innato que te hace ser diferente: cuando salimos del Colegio, sabemos que allí nos queda más que un profesor, un amigo.

Gracias.

Álvaro Sáenz García dijo...

sucribo todo los dicho por pablo.
Gracias

Comparte en las Redes

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...